—Bah, nunca lo entenderás —suspiró Zarpa Gris—. Tú no naciste en libertad. Eso marca la diferencia. Hay que nacer con sangre guerrera en las venas, o con la sensación del viento en los bigotes. Los mininos nacidos en hogares de Dos Patas nunca podrán sentir lo mismo.
Autor: Erin Hunter