—Espera. Juro que no te acose. Te lo dije, soy observador. Piensa en mi como Sherlock Holmes, solo que sin las malas habilidades sociales y el uso de cocaína.
— ¿Holmes consumía cocaína?
— ¿Si no como hacía para quedarse despierto toda la noche resolviendo crímenes?
Autor: Chelsea M. Cameron