Yo había pensado que no tenia una casa. Pero justo ahí, justo en ese momento, me di cuenta de que estaba equivocada. Hogar no era una casa, o un pueblo en un mapa. Era donde sea que estuviera la gente que amas, donde sea que estén juntos.
No un lugar, sino un momento, y luego otro, construyéndose uno sobre otro como ladrillos para construir un sólido refugio que te gustaría conservar por el resto de tu vida, sin importar a donde vayas.
Autor: Sarah Dessen