Al principio, pensé que su cara de pasmo era resultado de la sorpresa, pero al no desaparecer durante un rato largo, supe que no. De pronto caí en la cuenta de que si Michael siguiera todavía por aquí, Susan probablemente ya no «saldría» con él. No porque sea una mala persona o superficial o cruel, sino porque las cosas cambian. Y los amigos se van. Y la vida no se detiene por nadie.
Author: Stephen Chbosky