—Luego, tal vez tú y yo podríamos ir dando un paseo hasta esa cafetería de allí y tomarnos algo.
—No eres mi tipo.
Maldita fuera. A veces pasaba. En fin, ¿qué podía hacer una chica en esos casos?
—De acuerdo, ¿vas a dejarnos pasar?
—Me gustan más… verdes.
—Por-fa-vor. —Saqué mi último billete de veinte—. Ahora sí que me has dejado tiesa.
Me lo arrancó de los dedos y abrió la puerta.
Author: Darynda Jones