Hacía apenas unas horas, tenía a mi corazón por un navío capaz de romper las aguas de un océano enfurecido. Ya sabía que no era precisamente el más sólido del mundo, pero creía en el poder de mi entusiasmo.
Auteur: Mathias Malzieu
Diese Website verwendet Cookies, um Ihnen die bestmögliche Funktionalität bieten zu können.