Oh, vamos, estoy autorizado a decirte comentarios cachondos ahora, ¿verdad? Quiero decir, eres mi novia así que tengo que usar mis mejores movimientos contigo.
-Dilo otra vez.
- ¿Estoy autorizado a decirte comentarios cachondos?
-No, eso no. La siguiente parte.
- ¿Eres mi novia?
Asentí, con la respiración entrecortada, su sonido me hizo sentir como si estuviera volando. Él sonrió-. Eres mi novia, Ángel -ronroneó seductoramente, besando ligeramente mis labios-. Mi chica. -Me besó de nuevo-. La única que quiero.
Autore: Kirsty Moseley