Una de las cosas que me gusta de los libros es que son capaces de definir y condensar ciertas porciones de la vida de un personaje en capítulos. Es interesante, porque no se puede hacer eso en la vida real. No se puede terminar un capítulo y entonces saltar las cosas que no quieres vivir, sólo para abrir otro capítulo que se adapte mejor a tu estado de ánimo. La vida no puede dividirse en capítulos... solamente minutos. Los acontecimientos de tu vida están ligados a un minuto después de otro sin ningún tipo de lapso de tiempo o páginas en blanco o saltos de capítulos, porque no importa lo que pase, la vida sigue adelante y las palabras siguen fluyendo y las verdades son escupidas te guste o no, y nunca la vida te permitirá hacer una pausa y recuperar el jodido aliento.
Autore: Colleen Hoover